viernes, 10 de abril de 2020

Reflexiones

Voy a ser sincera. Creo que expresándome por aquí conseguiré rebajar algo de mi propia tensión y, de paso, ayudar a quien lo necesite. Tengo la sensación de que esta cuarentena se está llevando por delante muchas de las cosas que antes me gustaba hacer. Estoy haciendo un esfuerzo por no caer en la apatía todavía más y buscar alternativas. Así que he decidido escribir este pequeño texto para poner las cosas en perspectiva. Ya me contaréis si estáis conmigo o no.

Ni tú ni yo debimos sentirnos mal por no estar aprovechando al máximo la cuarentena. Es una situación completamente nueva para todo el mundo y es imposible mantener el ánimo alto todo el tiempo. Te mereces tu tiempo de desánimo, de agobio y de tristeza. No tienes por qué hacer deporte, no debes dedicarte a escribir o leer como si no hubiera mañana. Tampoco es una obligación cocinar cuando nunca ha sido lo tuyo.

¿Qué lo que a ti te viene bien para desconectar es pasarte el día en la cama? Adelante con ello, nadie va a juzgarte y si intentan hacerlo, ni caso. Es posible que lo que de verdad te funcione sea estar todo el rato haciendo cosas, también tienes mi apoyo. Cada cual tiene derecho a elegir su manera de relajarse en estos momentos. 

A ninguno nos han dado un manual de instrucciones. Lo único que podemos hacer es intentar pasar el rato del mejor modo posible. Sin presiones, intentando dejar de lado los pensamientos negativos en la medida de lo posible. Yo, por mi parte, no estoy escribiendo. Llevo desde noviembre sin tomármelo realmente en serio. Sé que es un buen momento porque tengo tiempo libre pero mi mente no parece estar en esto.

Así que me dedico a ver series y a limpiar (tengo la casa reluciente). También estoy haciendo un poco de deporte y de vez en cuando le echo un vistazo a Proyecto CJ pero de modo totalmente aleatorio. Sin sentido alguno. Leer también me está costando un poco, pero nada de agobios. Cuando se pueda, se podrá.
Creo que esa debería ser nuestra filosofía de vida en estos momentos tan caóticos y complicados. Ser pacientes y no obligarnos.

¡Mucho ánimo, mucha fuerza!

1 comentario:

  1. ¡Hola!
    Precisamente a mí me ha pasado lo que dices, que me instan a que haga deporte, que madrugue, que no sé qué... porque, claro, ahora tenemos muchísimo tiempo y seguramente cuando todo acabe y volvamos a estar a tope, nos acordaremos de todo lo que pudimos hacer y no hicimos. Pero si tengo la mente en otro sitio, ¿cómo me voy a poner en serio a estudiar, por ejemplo? Supuestamente tendría que seguir con las opos, pero no me concentro nada de nada...
    Al final he acabado como tú, con la casa reluciente jajaj
    Eso sí, leer sí que estoy leyendo mucho más, ya que al final es lo que más me ayuda a evadirme de todo esto.
    En fin, espero que vaya bien =)
    ¡Un saludo!

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