Sinopsis: «El intruso retiró el muñeco y observó la carita de la niña […]. No había ya luz en su rostro y la sensación de estar ante un receptáculo vacío se acrecentó al llevarse de nuevo el muñeco a la cara para aspirar el aroma infantil, ahora enriquecido por el aliento de un alma.»
La muerte súbita de una niña en Elizondo resulta sospechosa: el bebé tiene unas marcas rojizas en el rostro que indican que ha habido presión digital, y además, su padre intenta llevarse el cadáver. La bisabuela de la pequeña sostiene que la tragedia es obra de Inguma, el demonio que inmoviliza a los durmientes, se bebe su aliento y les arrebata la vida durante el sueño. Pero serán los análisis forenses del doctor San Martín los que convencen a la inspectora Amaia Salazar de investigar otras muertes de bebés, que pronto revelarán un rastro inaudito en el valle. Berasategui muere, entonces, inexplicablemente en su celda, lo que despliega una trepidante investigación que llevará a Amaia al auténtico origen de los sucesos que han asolado el valle de Baztán. Y mientras, desde el bosque, una impresionante tormenta llega para sepultar la verdad más demoledora. (https://www.planetadelibros.com)
Impresiones: en pocas palabras os diré que se trata de un final soberbio para una trilogía fantástica. Dolores Redondo vuelve a triunfar con una trama oscura, tenebrosa y llena de giros que hacen bombear nuestro corazón. Ha habido veces que estaba tan metida que no me he dado cuenta ni de la hora que era. Y no es para menos, porque la autora vasca es capaz de hacernos sentir miedo, pasión, tristeza y otras tantas emociones.
Con diálogos sencillos pero unos descripciones impecables, Redondo nos transporta a la Navarra más mítica. Se nota mucho el enorme trabajo de documentación que Ofrenda a la tormenta, así como sus predecesores, tiene detrás. Maravilloso.
Los personajes, por su parte, son muy reales. De ahí que el lector se sienta identificado y que tenga la capacidad de cogerles manía, como a mí misma me ha ocurrido en gran cantidad de ocasiones con la propia Amaia Salazar. Porque la protagonista de la saga es una mujer real llena de contradicciones. Real como la vida misma.
Geniales también Jonan y Montes. Pero no puedo dejar de lado al adorable James y a la carismática tía Engrasi. Un reparto único para una trilogía irrepetible.
Citas favoritas: «Es el tiempo de tránsito; en muchas culturas se considera que hasta esa edad los niños se mueven entre dos mundos y son capaces de ver y escuchar lo que ocurre en ambos, y eso los convierte en el vehículo adecuado para establecer comunicaciones con mundos espirituales u obtener respuesta en las peticiones.»
«No era la primera vez que se enfrentaba a la humillación y al oprobio. Cuando tenía nueve años era casi una experta en ese tipo de aprendizaje en el que nos doctora la vida, que no sirve absolutamente de nada, no te prepara, no te hace más fuerte; es solo una barrera cruel y profundamente enclavada en la roca que eres.»
SPOILER: «Cuando alguien a quien quieres muere, el mundo no se detiene, pero se reconfigura a tu alrededor como si el eje del planeta se hubiese torcido un poco, de un modo imperceptible para los demás que, sin embargo, a ti te dota de una clarividencia que te permite percibir aspectos de la realidad que nunca imaginaste.»
Nota: 9, un final maravilloso para una de las series que más me ha gustado en los últimos tiempos.
Wow amo este tipo de libros que se ven tenebrosos pero al mismo tiempo quieres saber mas, gracias por compartirlo sin duda tengo ganas de una lectura de este tipo.
ResponderEliminarEs brutal, Estephania, brutal.
ResponderEliminarMe ha encantado la trilogía, la verdad.