Sinopsis: Woolsthorpe, Inglaterra, 1666. Un joven genio de las matemáticas recibe la visita del misterioso caballero Alastair Welldone durante la gran epidemia de peste que asola Londres. Tres siglos y medio más tarde, Daniel Bagao, director de una revista especializada en asuntos esotéricos en los que, paradójicamente, no cree, recibe en su despacho de Madrid la visita de Ismael Koblin, un investigador de lo oculto que asegura haber identificado en cierto multimillonario norteamericano al inmortal conde de Saint-Germain... La revelación de Koblin, que Bagao considera ridícula, supondrá sin embargo el fin de su tranquilidad y el punto de partida de una prodigiosa trama que abarcará distintos países, planteará numerosos enigmas y se remontará cada vez más atrás en el tiempo. https://novela.algaida.es
Impresiones: sobre esta novela que llegó a nuestro hogar el pasado Festival Celsius debo decir que se trata de una idea brillante con una ejecución más bien mediocre. Lo que no deja de ser una lástima, porque Miguel Moyano tiene tanto un estilo fantástico como una capacidad narrativa única. Sin embargo, estas virtudes no son capaces de sacar al libro de un precario medio gas. Da la sensación que va a ocurrir algo, una explosión que no llega. De hecho, incluso cuando se alcanza la conclusión final, que es la parte más interesante, existe cierto hastío.
En cuanto a los personajes, Daniel es quien lleva sobre sus hombros todo el peso de la trama y resulta agotador, pues el autor peca de reproducir de manera constante e irritante todo lo que se le pasa por la cabeza. Básicamente, es el propio protagonista el que explica su forma de ser, lo que hace que haya echado de menos más mostrar y menos enseñar.
Como os decía, el estilo de Moyano me ha gustado, aunque no es capaz la novela por completo. Se lleva, en líneas generales, un «bien» por mi parte. Lo cierto es que esperaba mucho más.
Cita favorita: «¿Tenía que darle la razón a Koblin? ¿Debía admitir que un ser inmortal o, al menos, dotado de una longevidad extraordinaria (una especie de Matusalén), simulaba fallecimientos ficticios una y otra vez para no despertar recelos entre sus convecinos? Era demasiado descabellado, demasiado descabellado.»
Nota: 6,5. Una fantástica semilla que no ha germinado.
Una lástima que no haya terminado de convencerte, pues por la sinopsis parecía una historia de lo más interesante. La dejaré pasar. ¡Muchas gracias por tu reseña!
ResponderEliminarNos vemos entre páginas
La vida de mi silencio
Hola es una pena que no te terminara de convencer, gracias por la reseña. Saludos.
ResponderEliminarEarthquakemind sí, la verdad. Me encantó la idea pero no me cuajó.
ResponderEliminarSí, Cecy, penita me dio :(