Sinopsis: la luna volverá pronto. Que su regreso proclame la destrucción de la humanidad dependerá de dos mujeres. Essun ha heredado el poder de alabastro Decanillado. Con él espera encontrar a su hija Nassun y forjar un mundo en que los niños orogenes crezcan a salvo. Para Nassun, el que su madre haya sido capaz de dominar el Portal de los Obeliscos es algo que llega tarde. Ha sido testigo del mal que hay en el mundo y ha aceptado lo que Essun no comprende: que, a veces, lo que está corrompido no se puede purificar y hay que destruirlo. (www.megustaleer.com)
Impresiones: El cielo de piedra da a la trilogía de La tierra fragmentada un final correcto para esta historia que, sin lugar a dudas, echaré de menos. Por diferentes motivos. Aunque me gustaría comentaros algunos de los matices de esta opinión.
A pesar de esa añoranza que estoy segura que sentiré, creo que el desenlace se ha quedado un poco a medio gas. Hubiera deseado un final diferente para algunos de los personajes a los que (pese a todo) he terminado por coger cariño.
Tampoco me ha enganchado demasiado la historia, me ha resultado un poco repetitiva en ocasiones. Cuenta con algunas decisiones interesantes por parte de los personajes, sobre todo una muy vital que debe tomar Essun, pero ha habido momentos en los que me ha sobrado bastante prosa.
En otro orden de cosas, el worldbuilding de la obra es una auténtica delicia. N.K. Jemisin sigue ahondando en un mundo interesante, complejo y muy original.
También lo es el modo en el que está escrito el libro. A la segunda (sigue chocándome a pesar de tratarse del fin de la trilogía) y la tercera persona se une la primera a pesar de que el narrador sigue siendo el mismo. Algo bastante curioso.
En cuanto a los personajes, me quedo con Hoa. Me ha interesado mucho conocerlo un poco más y sobre todo saber de dónde vino. Como Essun me resulta intensa de más y Nassun un tanto irritante creo que es él quien mejor encarna lo que me gusta en un personaje. Los secundarios tampoco están mal, cumplen. Sin más.
Impresiones: El cielo de piedra da a la trilogía de La tierra fragmentada un final correcto para esta historia que, sin lugar a dudas, echaré de menos. Por diferentes motivos. Aunque me gustaría comentaros algunos de los matices de esta opinión.
A pesar de esa añoranza que estoy segura que sentiré, creo que el desenlace se ha quedado un poco a medio gas. Hubiera deseado un final diferente para algunos de los personajes a los que (pese a todo) he terminado por coger cariño.
Tampoco me ha enganchado demasiado la historia, me ha resultado un poco repetitiva en ocasiones. Cuenta con algunas decisiones interesantes por parte de los personajes, sobre todo una muy vital que debe tomar Essun, pero ha habido momentos en los que me ha sobrado bastante prosa.
En otro orden de cosas, el worldbuilding de la obra es una auténtica delicia. N.K. Jemisin sigue ahondando en un mundo interesante, complejo y muy original.
También lo es el modo en el que está escrito el libro. A la segunda (sigue chocándome a pesar de tratarse del fin de la trilogía) y la tercera persona se une la primera a pesar de que el narrador sigue siendo el mismo. Algo bastante curioso.
En cuanto a los personajes, me quedo con Hoa. Me ha interesado mucho conocerlo un poco más y sobre todo saber de dónde vino. Como Essun me resulta intensa de más y Nassun un tanto irritante creo que es él quien mejor encarna lo que me gusta en un personaje. Los secundarios tampoco están mal, cumplen. Sin más.
En general, he de decir, que es un libro que no ha estado mal. Me ha gustado.
Cita: «Creo que si quieres a alguien no deberías decidir la manera en la que esa persona te corresponde con su amor».
Nota: 7. Nos despedimos de la tierra fragmentada y los orógenes, deseando leer más de una autora tan original.
Cita: «Creo que si quieres a alguien no deberías decidir la manera en la que esa persona te corresponde con su amor».
Nota: 7. Nos despedimos de la tierra fragmentada y los orógenes, deseando leer más de una autora tan original.
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