Delirios de Cuarentena (Varios autores)

Sinopsis: os presentamos veinte breves historias y algún que otro delirio para nombrar y domar lo extraño, desde la ficción y el entretenimiento. Relatos para combatir al monstruo exterior y al que surge en el seno de lo cotidiano. Delirios surgidos en la cuarentena vivida en España desde el 14 de marzo del 2020 a causa de la COVID-19, de la mente de veinte autores que tratamos de forma directa o indirecta la pandemia, el encierro, la enfermedad, la metamorfosis, lo nuevo que, en realidad, ya ha sucedido más veces. Bienvenidos a la fortaleza. Tengan cuidado con la presencia que cubre su rostro con una máscara escarlata.

Miriam Alonso, Alberto Blanco Rubio, Miguel Ángel Cabrera, José Javier Carrasco Álvarez, Fernando Castillo, Carolina Corvillo, Sergio Corvillo Martín, Noé Expósito Ropero, Macarena Fedriani, Pedro Pablo G. May, Nicanor García Ordiz, Patricia Ginés, Coan Gómez, Juan Manuel González Otero, Nieves Guijarro Briones, José Carlos Herrero Yuste, Mariano Martín Sánchez-Escalonilla, Alberto Moreno Bustos, Ricard Reguant y Ricardo Vílbor componen el elenco de delirantes autores. 

 
Impresiones: en general, Delirios de Cuarentena es una lectura maravillosa que merece mucho la pena. A través de sus muy diferentes relatos (y diversos puntos de vista) nos acercamos a un suceso que sacude y seguirá sacudiendo nuestras vidas por mucho tiempo.

Con sus más y sus menos, casi todos los relatos tienen un buen nivel y se te meten dentro con un amplio abanico de sensaciones y sentimientos: surrealismo, alegría, soledad, compañerismo, pena o tristeza (entre otras) se dan cita para sobrecogernos y hacernos reflexionar.

Aunque hay tramas más sencillas que otras, me ha gustado mucho Mentiras por su desarrollo y por el impactante final. Hay otros que me han hecho sonreír, como el post-epílogo. En general, el conjunto te deja con un buen sabor de boca.

Ahora os dejo un pequeño comentario de cada relato.

- El lucero del alba: una interesante historia que conmueve y (a la vez hace pensar. Con Cádiz (mi Cádiz) y el folklore pagano como telón de fondo son impagables.

- Cotard o el último suspiro de la belleza: un relato de Carolina Corvillo que sobrecoge por lo inquietante y a la vez cercano que nos parece. Con su estilo detallista y plagado de significados ocultos te cala hondo.

- La piscina de magma solar: o como un confinamiento puede alterar a las personas que no se creían capaces de cometer según qué actos. O tal vez no.

- Mentiras: de mis relatos favoritos. Sobre familia y amor, sobre mentiras que contamos a los que queremos y (sobre todo) del sacrificio personal. Reflexivo y evocador pero de escritura sencilla y pulcra.

- El niño cobaya: un poema un poco triste y melancólico que, a pesar de todo, me ha parecido muy positivo. No entiendo mucho de poesía, pero me ha resultado un poema evocador que seguro que reeleré.

- Mari Pili: ¡maldita modernidad líquida! o como el surrealismo puede hacerte reír hasta las lágrimas. De mis favoritos. Me ha recordado al detective anónimo de Eduardo Mendoza.

- Delirios de un confinado, Muerte en Sweet Valley, Pasos a la entrada a ningún sitio y Ahora: un cuarteto de poemas oscuros y reflexivos que te dejan sin aliente y despiertan sentimientos de tristeza y desasosiego. Te hacen pensar.

- La familia de enfrente: curioso modo de mezclar historias y que todas resulten interesantes. La verdad es que me ha gustado mucho. Uno de mis favoritos.

- Futuras efemérides: una interesante reflexión sobre la libertad de expresión y las medidas sanitarias derivadas del Covid. De interesante lectura.

- Frenesí: o cómo desinhibirse al 100%. Un relato que saca lo más profundo de todos los personajes que lo pueblan. Incluyendo a su peculiar protagonista.

- Alcanzando a Ícaro: de mis favoritos. Una interesante reflexión sobre la muerte, la vida y, sí, también el amor y cómo lo vemos. El toque de ciencia ficción que tiene me ha maravillado.

- Un día de suerte: otro relato que me ha gustado bastante. Una historia llena de equívocos y un tanto surrealista. Aunque el desenlace me lo esperaba, me ha parecido de lo más entretenido.

- El daño de la pena: precioso, emotivo y muy triste. Me ha gustado como el autor es capaz de hilar las alucinaciones de un enfermo de Coronovirus con los recuerdos más dolorosos de su pasado.

- Soy caramelo: la vida es injusta. Si no lo sabíamos de antemano ha venido un virus inesperado que nos lo ha dejado aún más claro. En el caso de este relato, da la sensación que todo es oscuridad y que cuando parece que las cosas empiezan a enmendarse vuelven a torcerse. Precioso.

- Sin prisa: breve pero brillante. Un relato sobre como se llega al final de todo, sobre como los sueños se rompen y no queda sino dejar todo atrás e irse lentamente.

- La vela: o la esperanza que nos ata al mundo, que nos da el calor para continuar. Sinestético con un estilo literario genial.

- El enemigo: muy sensitivo y bien escrito. Se trata de la reflexión de un escritor al que le cuesta juntar letras y que va cayendo en una espiral de desasosiego por la pandemia. Muy bueno.

- ¡¡¡Taxi!!!: del surrealismo más absoluto a la crueldad, todo ello aderezado con una buena pizca de humor y una prosa fluida y que atrapa.

- Diario de cuarentena (Cuarentena, Cuando todo esto acabe y Ritual de una mujer ante el espejo): se trata de bellas reflexiones sobre las pequeñas cosas, lo que haremos cuando termine la situación y lo bueno que pueden aportar las pequeñas cosas. Muy buenas.

-Epílogo. Narraciones de una vida lúcida a propósito de una pandemia: un curioso texto sobre un paseo y las reflexiones que conlleva. De como un relato se convierte en epílogo. No está nada mal.

- Post-epílogo. Una nota de esperanza: la piel del amor: se trata de una preciosidad que mezcla la propia realidad del autor con la historia que crea. Una manera genial de cerrar una antología que me ha encantado.

Cita: «El dicho de que no sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos, expresado sencillamente en el lenguaje popular, recoge una de esas verdades esenciales que, por parecernos una pura obviedad, solemos olvidar.»

Nota: 8. Una lectura interesante, reflexiva y muy cuidada.